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Más información AceptoEn Las Valdesas se cultivan cinco variedades diferentes de olivo, se recolectan y se muelen separadamente para obtener cinco aceites de oliva virgen extra monovarietales, cada uno con características diferentes, para que nuestros clientes los prueben y los utilicen en función de cada uso en su cocina.
Variedad característica de Tarragona y Lérida. Frutado, aromático y suave. Prácticamente sin notas amargas ni picantes, lo que lo hace ideal para personas que se inician en el consumo del aceite de oliva virgen extra. Proponemos su uso en crudo para el desayuno, así como en platos delicados en los que se quiere evitar la presencia rotunda del aceite de oliva. El aceite de oliva arbequina es muy usado en repostería como sustituto de la mantequilla.
Oriunda de la Toscana, región prestigiosa en la elaboración de aceites. Cremoso y exclusivo: Es de los pocos frantoio españoles que existen actualmente. Tan frutado y aromático como el arbequino pero con ligeros y elegantes toques picantes en garganta. Idóneo para aliños y demás consumos en crudo.
Variedad característica de la zona central de Andalucía. Lo consideramos el aceite más versátil en la cocina: guisos, asados y frituras. Valores medios en cuanto a notas dulces, frutadas y amargas.
Poco habitual en el mercado. Aceite con matices particulares y cuerpo. Para sorprender a los más entendidos y para experimentar con los platos de siempre con ligeros cambios.
Procedente de Jaén. Clásico amargor y picor característico en garganta. El aceite de oliva picual es el más cardiosaludable de las variedades por su alta concentración de ácido oleico y polifenoles. Posee una gran estabilidad a altas temperaturas por lo que es muy recomendable para freír. Para personas habituadas al aceite de oliva.